La quiche es un plato que me gusta porque lo puedes prepara tanto para una comida como para una cena y como fría está buena, la puedes dejar preparada con antelación.
Si tienes invitados es una buena opción, si la comida o la cena va a ser de picoteo.
Como cualquier masa admite todo tipo de variaciones, añadiendo los ingredientes que más nos gusten. Generalmente la suelo preparar con hojaldre, pero esta vez utilicé masa brisa y no sabría decir con que masa me gusta más, pues son bastante diferentes y con las dos queda igual de buena.
Ingredientes
1 lámina de hojaldre o masa brisa
150 gr de espinacas (en mi caso congeladas)
200 ml de nata
3 huevos
1/2 cebolla
queso de cabra (aquí la cantidad a vuestra elección, según os guste más o menos)
aceite
sal
Preparación:
- Picar la cebolla fina y pochar con un poco de aceite en la sartén, cuando empiece a tomar color añadir las espinacas y sazonar.
- Calentamos el horno a 210º calor arriba y abajo
- Mientras se pochan las espinacas, extendemos la masa en el molde y lo pinchamos con un tenedor.
- Batir los huevos y añadir la nata. Mezclarlo bien y añadir un poco de sal.
- Escurrir las espinacas pochadas con la cebolla y añadir a la mezcla de huevos y nata y mezclarlo bien.
- Verter la mezcla sobre el hojaldre y añadir el queso encima.
- Introducir en el horno a una altura baja durante unos 30 minutos a 250º calor arriba y abajo. El tiempo es orientativo pues depende de cada horno y de lo caliente que esté el horno cuando pongáis la quiche.
- Pinchar la quiche con un palillo y si sale limpio ya la podemos sacar del horno.
Espero que os guste!