Encontré esta receta en Cocinillas y me gustó porque me pareció una forma diferente de comer verdura.
Se puede preparar como acompañante para algún pescado o como plato único. Yo lo hice como plato único para cenar y cenamos bastante, no nos hizo falta comer nada más.
Como en todas las recetas le podéis añadir, cambiar o quitar algún ingrediente, a vuestro gusto. La próxima vez cambiaré el atún por pollo, que creo que también puede quedar bien y será un plato diferente.
Ingredientes (para 2 personas):
1 calabacín grande
2 tomates
2 latas de atún
3 huevos L
Queso rayado
Orégano
Preparación:
Cortamos el calabacín en rodajas no muy gruesas, el tomate a taquitos, le quitamos el aceite al atún y los desmigamos bien.
Precalentamos el horno a 200º, calor arriba y abajo.
En una fuente, vamos colocando una capa de calabacín, taquitos de tomate, le ponemos un poco de sal, añadimos el atún y vuelta a empezar.
Batimos los huevos, echamos por encima de la mezcla de forma que se repartan bien.
Ponemos queso rallado, un poco de orégano. Tapamos y al horno, durante 45 minutos o hasta que pinchéis el calabacín y esté hecho.
Ahora le quitáis el papel de aluminio y lo subimos en el horno para que se gratine y lo sacamos.
Si tenéis prisa, podéis hacer el calabacín a la plancha un poco (el día de antes y por la mañana si es para cenar) y después es montar las capas y ponerlo al horno igual, pero necesitará menos tiempo de horneado.
Espero que os guste!