Cuando vi esta receta en el blog de Mi Dulce Tentación sabía que tenía que probar estas galletas. En casa somos unos enamorados de las cookies de chocolate, pero me apetecía encontrar alguna otra receta de galletas de las que quitan el hipo y estas lo son.

Como veréis son igual de sencillas que las cookies. Dejan un aroma en la cocina cuando las estas horneando de impresión y el sabor es genial.

Yo al igual que las cookies hago las galletas con dos cucharas, no utilizo las manos. Espero de verdad que os animéis a prepararlas, si os gustan las galletas no podéis dejar de probarlas.

Ingredientes:

– 30 g de harina.

– 1/4 cucharadita de bicarbonato sódico.

– 200 g de chocolate fondant.

– 25 g mantequilla sin sal.

– 2 y 1/2 cucharadas de café soluble

– 2 huevos XL

– 115 g de azúcar glas.

– 1 cucharadita extracto de vainilla (como no tenía utilice ron como con las cookies)

– 50 g de gotas de chocolate.

 Preparación:

 Derretimos el chocolate junto con la mantequilla, una vez fundidos apartamos del fuego y agregamos el café soluble removiendo bien para mezclar.

En un cuenco batimos los huevos con el azúcar hasta obtener una crema pálida y espesa. A la mezcla de los huevos agregamos el chocolate derretido, el ron (o el extracto de vainilla) y removemos todo muy bien.

Añadiremos la harina y el bicarbonato, en la receta ponía tamizados, yo no lo tamicé y quedó bien y por último las gotas de chocolate.

Tapamos el cuenco donde hayamos hecho la preparación y lo metemos a la nevera durante al menos 1 hora, es importante que la mezcla esté bien refrigerada antes de meterla al horno, sino resultara bastante difícil coger porciones para hacer las galletas.

Como os he puesto arriba yo las porciones las hago con cucharas de postre.

Precalentamos el horno a 180º, con calor arriba y abajo.

Ponemos papel para el horno en la bandeja y vamos poniendo las cucharadas no muy grandes de masa, hay que dejar una separación de unos 5 cm entre cada una para que al cocerse y expandirse no se nos peguen.

Introducimos en el horno durante unos 10-12 minutos, yo os aconsejo que como mucho sean 10 minutos, en estas galletas al ser tan oscuras no os podéis guiar por que tengan un color dorado. La primera hornada serán 10 minutos como mucho, pero las siguientes al tener ya el horno un rato encendido serán de menor tiempo, tenéis que ir controlando. Si se os hacen demasiado no pasa nada, quedan más oscuras y más crujientes.

Las dejamos enfriar en una rejilla…ya sé que os costará resistir la tentación porque huelen de maravilla, pero mejor evitar una quemadura.

Espero que os gusten!!