Generalmente cuando tengo invitados o voy a casa de alguien suelo llevar una tarta, pero en esta ocasión unos buenos amigos me pidieron una tarta para una celebración familiar.

Es la primera vez que me piden una tarta y la verdad se me aceleró bastante el corazón, pensando que hacer y como, claro que todo fue a mejor ¿ironía? cuando me dijeron que la querían para el sábado (era martes, de la misma semana) y claro no les daba igual el sabor, a poder ser querían que fuese de turrón y merengue y vosotr@s pensaréis, ¿donde está el problema? pues que hasta el momento no había hecho merengue nunca (nooo, nunca) y el turrón en casa no nos gusta por lo que no tenía ninguna receta de postre con este ingrediente.

Como buenos amigos, me dieron opción a no aceptar el encargo, pero claro me hacía ilusión por la confianza depositada y además era un reto. Preparar una tarta para una celebración, en la que yo no iba a estar (si estás siempre puedes ver la reacción de la gente y claro está, probarla) y como no, preparar una tarta con ingredientes que no había utilizado hasta el momento…ahí es nada.

Así que con mi imaginación y buscando una receta de aquí y otra de allá, se me ocurrió hacer una tarta de capas de merengue con capas de turrón. Al final desistí de esta idea por varias razones: me acordé que tenía un paquete de bizcocho cortado (del que venden preparado para tartas…lo había comprado para una tarta que tenía en mente hacer y no me apetecía hacer el bizcocho), no quería arriesgarme a que no me saliese bien y no tenía demasiado tiempo para pruebas.

 Así que lo que hice al final es lo que os explico más abajo, pero antes quiero decir que cualquiera de los blogs de cocina que sigo y que me pueden seguir, puede pensar al ver la tarta que tampoco es nada del otro mundo, pero yo me siento muy orgullosa, pues teniendo en cuenta que nunca había hecho merengue, además decoré la tarta con el y que para una primera vez no quedó mal.

 Al final os contaré la valoración de la tarta.

Ingredientes:

1 paquete de bizcocho del que van tres láminas

2 tabletas de turrón blando

800 ml nata para montar

12 cucharadas de agua

8 cucharadas de azúcar

4 claras de huevo

100 gr de azúcar

colorante rojo

Preparación:

• Primero hice el almíbar con el que bañé las láminas de bizcocho. Para eso ponemos en un bol el agua y el azúcar y lo introducimos en el microondas. Lo dejamos calentar unos 5 minutos (yo lo tuve unos 3 minutos y fue suficiente). Lo sacamos y añadimos ½ tableta de turrón, previamente deshecho con las manos. Lo mezclamos bien con unas varillas manuales hasta que se deshaga y después lo colamos para que no queden tropezones y reservamos.

• Después preparamos la crema de turrón para rellenar la tarta. Cocemos 600ml de nata en un cazo , cuando empiece a hervir apagamos el fuego y añadimos la media tableta que nos había sobrado y media más. Removemos bien con las varillas manuales hasta que se deshaga. Yo esta vez no lo colé ni lo trituré para que quedasen trozos la almendra que lleva el turrón. Lo ponemos en un bol y cuando esté frío lo ponemos en la nevera y lo dejamos 1 hora.

• Cuando vayamos a montar la tarta sacamos la crema de turrón de la nevera le añadimos 200 ml más de nata y lo montamos con las varillas.

• Ahora montaremos la tarta, bañando cada capa de bizcocho con el almíbar y poniendo entre cada capa de bizcocho la crema de turrón. Encima de todo no puse crema porque iba a cubrir la tarta con merengue.

• Para hacer el merengue montamos las claras a punto de nieve y vamos añadiendo el azúcar sin dejar de batir hasta que obtengamos un merengue. Como quería decorar la tarta con un toque de rojo reserve un poco del merengue al que le añadí colorante rojo. Con el resto del merengue cubrí toda la tarta y después la decoré un poquito. Al final decoré la parte que quería de rojo.

Resultado de la tarta, para mí espectacular por lo que os digo, era la primera vez que hacía merengue y que lo trabajaba y está claro que con la práctica quedará mejor pero para ser la primera, no quedó mal ¿no os parece?

En cuanto a mis amigos me dijeron que les gustó mucho, así que yo más contenta que unas castañuelas, espero poder repetir la experiencia.